Mucho se habla sobre las barreras y miedos que puede experimentar un cliente durante un proceso de coaching y es que justamente, superarlos, es parte del éxito del proceso. Lo que no se ha estudiado suficiente son las barreras emocionales y los miedos que enfrentan los coaches mismos.
Los miedos del coach
Joshua Steinfeldt, psicólogo de la Universidad de Pensilvania, realizó un estudio basado en una serie de entrevistas para entender los miedos de los coaches. Se categorizaron algunos de los temores principales y estos fueron los más comunes:
- Miedo a fallarle al clientes o a no aportar valor. Es decir, miedo a no hacer una diferencia para el cliente, a no ayudarlo a progresar, a no ser efectivo.
- Miedo a no saber lo suficiente, a experimentar el síndrome del impostor, fracasar, no saber qué hacer o decir, a ser juzgado por incompetente.
- Miedo a no poder vivir del coaching. Los coaches, sobre todo aquellos que comienzan, temen cobrarle a los clientes, temen cobrar de más o no poder ganar lo suficiente para vivir. Les da miedo ser despedidos y perder el negocio.
- Miedo al rechazo, desaprobación o falta de conexión con el cliente. En este caso se trata de miedo a hacer preguntas difíciles,temor a la intimidad, al silencio.
- Miedo a hacer daño en el cliente de forma involuntaria. Miedo a entrar en un terreno en el que el coaching no puede ayudar, de formular mal los tiempos. Temor de cruzar el límite con el cliente, de forzarlo a algo con lo que no puede y no darnos cuenta, de no respetar el código de ética, de que el cliente no esté listo.
Otros miedos que también se analizaron y que están presentes, aunque en menor medida, fue el miedo a direccionar al cliente, el miedo a no lograr el desarrollo profesional esperado: a no hacerlo bien, miedo de ser criticado, de ser evaluado, de no obtener la credencial, de no cumplir con las expectativas del programa, de no ser el coach que esperaba.
¿Cómo enfrentar los miedos?
En Team Power buscamos conocer más sobre los miedos de nuestra comunidad. La encuesta lanzada nos arrojó que el miedo a no agregar valor, es también, la principal preocupación entre los coaches que respondieron (en todas las categorías de experiencia, desde menos de 200 horas y hasta más de 3000 horas).
Me sumo con mis colegas, es verdad que el miedo a no aportar valor también ha estado presente en mi práctica en distintos momentos.
OK, está claro que todos los coaches experimentamos miedos en algún momento de nuestra carrera, el quid del asunto es ¿cómo podemos enfrentarlos y sobre todo, superarlos?
La construcción de la valentía, del coraje (courage en inglés y francés) es un factor determinante que debemos desarrollar para lograr la maestría del coaching. Pero ¿es posible ser más valiente? ¿cómo se desarrolla?
La valentía
La valentía es un concepto que ha ido evolucionando a lo largo de la historia. En la actualidad, Brené Brown –académica e investigadora de la universidad de Houston que estudia el tema de la valentía desde hace dos décadas– ha profundizado magistralmente al respecto del tema. Para Brené Brown la valentía está asociada con tu capacidad para ser vulnerable y salir de tu zona protegida. Ser valiente implica romper la coraza con que te cubres cuando sientes miedo.
Como coaches queremos aportar valor, hacer del coaching nuestra profesión y hacerlo bien. En el intento por conseguirlo experimentamos rechazo, vergüenza, soledad, mucho dolor. El primer paso para mostrar valentía (courage) como coach y ser la oferta que tu cliente necesita, es abrir nuestros miedos y contactar con la vulnerabilidad.
Los dejo con esta cita de Theodore Roosvelt que, Brené Brown comparte, le cambió la vida y le permitió ser vulnerable y valiente a la vez:
En una próxima entrega revisaré más profundamente el tema de la vulnerabilidad y analizaré los procesos para que el coach trabaje y supere sus propios miedos. Finalmente, trabajar con ellos es parte de nuestro camino para lograr la maestría en coaching.
Mastering Coaching Skills es un poderoso programa que no sólo te permitirá integrar las competencias de coaching a tu práctica profesional, también te acompañará a enfrentar los miedos que todos tenemos como coaches; aprovechando de sesiones formativas, mentorías y supervisión en pequeños grupos.
Muchos coaches que han egresado de este programa, justamente han destacado cómo MCS los ayudó a traspasar las barreras así como a sentirse y a actuar como coaches de verdad.